Un estudio del hospital de Santa Maria Nuova en Florencia, realizado sobre una muestra de 800 mujeres, concluye que, el deseo sexual se incrementa cuando el vino se consume moderadamente al aumentar, éste, la presión sanguínea en las zonas erógenas de la mujer.
El alcohol contiene etanol que, en pequeñas cantidades, estimula una parte del cerebro denominada hipotálamo que, controla las funciones básicas y los niveles hormonales, lo que da lugar a sensaciones de relajación, algo así como una ligera flojera. Una ingesta excesiva de alcohol, en cambio, provoca el efecto contrario.
En ocasiones, habremos podido oír hablar de las propiedades afrodisíacas del chocolate que, al igual que el vino tinto, contiene aminas que son componentes orgánicos naturales. Análisis de vino tinto demuestran que las mayores concentraciones de aminas se encuentran en la Merlot, Cabernet Sauvignon y Cabernet Franc.
La histamina, una de las aminas más conocidas, tiene un efecto sedante que puede comprimir receptores en el cerebro responsables de estados de ansiedad; también puede ser un estimulante, pero en demasía se consigue el efecto adverso, somnolencia y disfunción sexual. Así que un vaso de un buen Carmenere en lugar de cuatro, es lo recomendable para obtener todo lo mejor de un vino.
Según los investigadores de la Universidad de Kingston de Londres, el vino tinto puede aumentar la cantidad de testosterona en los hombres. El ingrediente clave en el vino es la quercetina que bloquea la eliminación natural de testosterona a través de la orina. El exceso de vino tinto tendrá el efecto contrario.
La capacidad que tiene el ser humano para memorizar y recordar aromas es muy fuerte y prolongada en el tiempo. En una cita, un estilo particular de vino puede llegar estimular esos recuerdos. A partir de ahora, tienes que prestar más atención a los aromas que te ofrece una copa de vino, ya que estos, podrían hacerte revivir grandes momentos.
Los aromas del vino pueden llegar a ser estimulantes pero, actúan de forma diferente en los hombres que en las mujeres. A las mujeres, en términos generales, les atraen más los aromas especiados y los que recuerdan a ciruelas negras, tierra y musk. De hecho, unos estudios recientes en Estados Unidos evidencian que las feromonas masculinas son muy parecidas a las de la Pinot Noir, la que procede de “cool climates”. Lo que todavía no he logrado encontrar son estudios que nos den pistas sobre vinos que contienen feromonas similares a las femeninas.
También es cierto que el vino tiene antioxidantes y polifenoles que en ingestas moderadas dicen que este tipo de antioxidantes da un brillo especial a la piel.
En conclusión, cuando se trate de vino y seducción, bebe moderadamente y bebe bien. Elije con criterio, trata de identificar los aromas, disfruta del momento y de la magia del vino.
Fuente: http://mendozaopina.com/vinos/es-el-vino-un-afrodisiaco-57423